Los camarones son posiblemente los mariscos más fáciles de preparar, pues tienen un sabor tan fuerte que apenas necesitan una pizca de sal y un chorrito de jugo de limón y estarán listos para comer. Solamente hay que medir el tiempo de cocción y retirarlos del fuego tan pronto comiencen a ponerse rosados, pues si se cocinan demasiado se pondrán demasiado duros. Y de preferencia deben cocinarse con la cáscara, para que conserven todos sus nutrientes y su sabor. Estas son algunas de las formas básicas de cocinarlos: Puedes ponerle al agua algunas especias, además de la sal, para resaltar su sabor. Hiérvelos con suficiente agua y en pequeñas cantidades, para que se cocinen de manera uniforme, y tan pronto se pongan rosados estarán listos para comer. Usa los camarones hervidos para preparar ensaladas y pastas. Con salsa mayonesa o picante saben deliciosos. Antes de cocerlos, corta la cáscara con un cuchillo afilado para extraer la vena. Después vi...